“El fondo del corazón es árido. El hombre siembra sólo aquello que puede… y lo cuida”. Stephen King, Cementerio de animales

Mensajes del Subtrópico Profundo

Por José María Marcos | Reseña 991 | Solo Tempestad | 2 de febrero de 2021


En la provincia de Chaco funciona desde hace algunos años el sello editorial Literatura Tropical, que entrelaza su trabajo alrededor de la escritura con performances, dramaturgia y diversos experimentos sonoros y visuales, forjados en el Subtrópico Profundo, denominación elegida por los creadores para renombrar a la región . “A pesar de las forreadas, de las adversidades, pudimos. Las pequeñas economías de la cultura somos las más castigadas por la crisis; no hay sector que se salve de esta debacle global sin precedentes. Sin embargo, todavía creemos en los resplandores de la literatura”, dicen los impulsores en su web, donde se pueden ver los numerosos títulos editados desde 2014 hasta el presente, junto a coloridas y ruidosas iniciativas. “Nuestra lucha está en poder seguir mejorando la calidad de esa cadena de valor, cuyos eslabones tiene fundamentalmente a les autores como protagonistas, pero la fortalecen editores, correctores, traductores, diseñadores y artistas gráficos y visuales”, declaran.
Nada parece ser ajeno a la retórica tropical y en su página encontramos videos con músicas disonantes, lecturas, entrevistas, book-trailers y reseñas; como así también audios del grupo Los Cenobitas reflexionando sobre un gurú criogenizado, las aventuras de Stanley Fafefifofu Penevenoso, la vida sexual de Oscar Mediavilla, las características de Reina Reech Alien y otras preocupaciones de  orden sideral, que terminan sonando cercanas al entrecruzarse con nuestro tiempo. 
Conocí esta propuesta al participar de la 1° Feria de Libro Digital Chaco 2020 y compartir la charla Clase B con Leonardo Oyola y el escritor y periodista Alfredo Germignani, uno de los puntales de la Literatura Tropical, un colectivo con aportes de numerosos adherentes, entre ellos Matías Ávalos, María Bakun, Mario Caparra, Ariel Sobko, Mario Quinteros, Laura Sosa, Leonardo Guardianelli, José González, Esteban González, Nicolás Sánchez, Claudia Goy, María Julia Magistratti, Orlando Van Bredam, Noelia Albretch, Alejandro Quirós, Maia Bradford, Luis Argañarás, Lucas Ameri y Sacerdote Judas.
Tras aquella Clase B, tuve la posibilidad de llegar a la obra de Alfredo Germignani (Resistencia, 1981), quien ha trabajado en El Diario de la Región y La Voz de Chaco; conduce un ciclo de radio online con la escritora Agustina Bártoli; y se ha desempeñado en el Ministerio de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología; en el Museo de Medios de Comunicación Raúl Delfino Berneri y en el Instituto de Cultura de Chaco (actualmente, es vicepresidente). 
Germignani tiene una nutrida producción y accedí a tres de sus libros: Rock (2014, escrito en coautoría de Guido Moussa) —ya reseñado en Solo Tempestad por Coni Valente—, Mary Elizabeth SuperStar (2020) y Donde duermen los gorilas (2020). Tanto en la impronta de Literatura Tropical como los tres textos de Germignani se aprecia una permanente apuesta por apropiarse de las jergas, los discursos mayoritarios, la voz del poder y los lugares comunes, para invadirlos y aumentarlos hasta hacerlos estallar, a veces con humor, otras con acidez y hasta paranoia, como estrategias para liberarse de aquello que se ha fosilizado. 
En Rock (2014), Alfredo Germignani y Guido Moussa comparten la autoría y en la piel de Fernando Funes y Alberto Litter, respectivamente, le dan vida a una banda trash noise Los Cenobitas, con la que se inscriben en un concurso organizado por Pepsi y deben medirse con Séptimo Círculo, Los Holograms Pink, Macho Gat Garage, Triste y Deprimido, Los Materia Fecal y otras agrupaciones de un tórrido arrabal. “Los Cenobitas eran tipos duros. Hoscos malditistas de la nihilista nada, escribientes de la putrefacción semántica, no gozaban sin embargo del natural talento que exige la composición de una pieza musical decente ni tampoco gozaban de la sordera privilegiada del primero de los románticos y último de los clásicos, máster Ludwing van B”. Así se describen estos aventureros, en un tono impiadoso que aplicarán para referirse al mundo de la música, las promesas de gloria y todos los avatares de una travesía que empieza con cierta candidez y de a poco se va volviendo oscura.
En Mary Elizabeth SuperStar (2020), Germignani retoma el disfraz de Fernando Funes (su alter ego en Rock) para hablar de la actriz Mary Elizabeth Winstead, quien ocupó “con pasión fervorosa el puesto N°1 de mi lista personal de actrices favoritas del cine de terror y de ciencia ficción de todos los tiempos”. Con una prosa desfachatada, Germignani-Funes da cuenta de manías, fantasías y deseos de reconocimiento por parte de la admirada, de quien dice haberse enamorado después de ver Destino Final 3 (2006). Por esas vueltas del tropicalismo delirante, se produce un desdoblamiento espacio-temporal y Winstead y Funes viven una odisea irrigada por  sustancias alucinógenas.
En Donde duermen los gorilas (2020), los “relatos futuristas” de un mundo paralelo (que se parece demasiado al nuestro) recrean la voz de quienes aspiran al poder y al dinero sin preguntarse “¿qué quieren hacen con el poder?” ni “¿para qué desean ser millonarios?”, mientras se van acomodando dentro de una maquinaria que los consume.  La galería de figuras pavorosas, instituciones corrompidas y miserias cotidianas se va poblando a medida que pasan las páginas, donde pueden leerse pasajes en los que al gobernador se lo llama el Gran Mono, el diario oficial es La Voz de la Verdad y todo está en permanente transformación, como sucede en este fragmento del relato que da nombre al conjunto: “Destrozaron un cráneo metálico usando ejemplares extralarge de la Biblia. Un libraco de cinco kilos y tres cuartos de gramos, cuatro mil quinientas setenta y seis páginas ahuesadas de la Palabra de Dios, tapas duras de algarrobo enchapadas en plata esmerilada, y un anguloso y filoso lomo de diez centímetros, puede ser un arma mortal si es utilizada como un martillo”.
Igual que esta enorme Biblia, las obras de Germignani y la Literatura Tropical muestran un primer rostro para luego transfigurarse en otros, dejándonos la sensación de que estamos frente a un planeta en ebullición, caldeado, maniático y en plena expansión. www.literaturatropical.com

Rock (2014)
Autores: Alfredo Germignani y Guido Moussa
Editorial: Contexto
Género: novela

Mary Elizabeth SuperStar (2020)
Autor: Alfredo Germignani
Editorial: Literatura Tropical
Género: novela

Donde duermen los gorilas (2020)
Autor: Alfredo Germignani
Editorial: Literatura Tropical
Género: cuentos

Complemento circunstancial musical:
Niña vampira inmortal hermosamente hermosa | Literatura Tropical