Las elegidas, de
Rogelio Retuerto, es la novela ganadora del 1º Certamen de
Literatura Erótica ¡Oh! 2016 organizado por Ediciones Culturales de Mendoza.
Ambientada en la actualidad (con viajes desde lo urbano a zonas rurales), narra
las desventuras de atractivas jóvenes, seleccionadas por un ente con aspecto de humano, que busca fecundarlas. Se trata de “hembras” sanas, fuertes y de
alto coeficiente intelectual.
La historia comienza en un boliche bailable con el encuentro
entre la entidad y una de las elegidas, en lo que podría ser un cruce casual
entre dos personas en medio de música, tragos y diversión. El autor va relatando
los acontecimientos con precisión y naturalidad, intercalando detalles que hablan
de las condiciones especiales del extraño: “Las chicas se levantaron y pasaron
frente a él, rumbo al baño. Ella lo miró, esta vez le sonrió. Él sintió los
efluvios que emanaban de ella: una mezcla del olor de las bacterias
multiplicándose en sus axilas y la entrepierna, con la liberación de feromonas.
Él volvió a mirarla por detrás. Cuando regresaron del baño, volvieron a pasar
frente a la barra para buscar el saco que la rubia había dejado, quizás adrede,
en el esquinero. Él sabía que había llegado el momento, era ahora o nunca”.
Lo que sigue es una minuciosa descripción de rituales de
seducción y apareamiento, como si de pronto las inhibiciones de la cultura se
cayeran y la única ley posible fuera la del mundo de los animales. Sólo importa
la supervivencia, sin prohibiciones que pongan freno a los abusos, los
asesinatos y el canibalismo. Con un lenguaje directo, el autor crea intensos pasajes de alto erotismo y horror.
Luego de los ataques, las víctimas se contactan entre sí, y casi
como ellas, los lectores vamos descubriendo que existiría una especie superior,
quizá extraterrestres, o, bien, semidioses, que antiguamente “eran respetados por las
naciones de la Tierra” y “no necesitaban ocultar su verdadera identidad ni
raptar especímenes” para iniciar un nuevo ciclo en este planeta.
Mientras oscuras fuerzas empiezan a operar, las mujeres comprenden que su vientre es territorio de disputas y
quienes deberían protegerlas se transforman en una amenaza. Revelado el cuerpo como
un campo de batalla, la trama de esta potente novela se conecta, con acierto, a la lucha por modificar concepciones del Estado y
de una parte de la sociedad que tienen su peor rostro en el incremento de la
violencia de género y los femicidios. (Por
José María Marcos, La Palabra de Ezeiza, 15-06-17)