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“El mundo siempre es nuevo para alguien”

Agradezco a la colega Claudia Cortalezzi la entrevista que me hizo para La Información, con motivo de la salida de Monstruos de pueblo chico (Galerna, 2015). Reproduzco las preguntas que se publicaron el miércoles 23 de septiembre de 2015 en la sección Cultura.

Claudia Cortalezzi (CC): —Los que seguimos tu literatura ya estamos acostumbrados a tus historias de terror. Me gustaría que me contaras por qué este género y no otro.
José María Marcos (JMM): —Me gusta la literatura en general y disfruto de las más variadas temáticas. No tengo prejuicios. Sin embargo, la fantasía y el horror conforman el campo de expresión que me transformó en un devoto lector. Cuando sentí la necesidad de crear mis ficciones, fue algo natural volcarme por estas corrientes, pues un alto porcentaje de lo que sigo leyendo está vinculado a este mundo, al igual que las historias que suelo imaginar.
CC: —Tus últimos libros (El hámster dorado y este nuevo) están dedicados al público infantil. ¿Cómo surgió la idea de escribir para chicos?
JMM: —En una charla, la escritora Liliana Bodoc me sugirió que escribiese para niños. Dijo que tenía condiciones para hacerlo porque mis textos trabajaban más en el orden de lo simbólico que de lo fenomenológico, y que eso era muy valorado en la literatura infanto-juvenil. Bajo su guía, leí autores que me recomendó y, también, escribí El hámster dorado, que años más tarde otra gran escritora, Norma Huidobro, eligió para Del Naranjo. Agradezco enormemente haber descubierto este vasto universo.
—¿Cómo aparecen tus personajes?
JMM: —Uno toma cosas de todos lados. Tratando de buscar una fórmula que explique este proceso diría que un personaje nace exagerando y llevando al extremo alguna característica propia o de algún amigo, familiar o conocido.
CC: —¿Hay alguna fórmula para atrapar a los chicos actuales, tan rodeados de tecnología?
JMM: —El mundo siempre es nuevo para alguien. Las tecnologías son herramientas para contar las historias que vienen reconfortando a miles de niños, jóvenes y adultos desde los albores de la humanidad. Pienso que un buen cuento (sea a través de un libro, una narración en vivo, una peli o la PC) abre puertas en el corazón de los niños y las niñas que buscan crecer y aprender a enfrentar sus propios temores, en un mundo que los espera con sus luces y sus sombras.